Llevamos más de 10 años dedicándonos al sector boda y por nuestro obrador han pasado ya muchas parejas. Cada una de ellas nos ha dejado un poquito más de experiencia y saber hacer (¡gracias, chicos!) así que hoy queremos reflejarlo en este artículo contándote las 5 cosas más importantes que deberías de tener en cuenta al escoger tu tarta de boda.

Tarta de boda naked cake de pistacho y chocolate con flor

1. ¿Porciones de cena o de recena?

Este es un detalle importante ya que decidirá el tamaño de tu tarta. No es lo mismo que la tarta nupcial sea un extra que se suma al postre a que sea el propio postre, ya que lo más habitual es que la porción de postre sean alrededor de 125gr y la de recena ronde los 60gr-70gr.

Si sois pocos pero quieres una tarta que estéticamente luzca más grande, te recomendamos inclinarte por un modelo más alto y estrecho, ya que esto le da altura a la tarta y hace que se vea más llamativa. Las bajitas y anchas son más fáciles de cortar, pero no tienen ese factor wow que muchas parejas buscan.

2. Escógela de tu sabor favorito, por exótico que sea.

Algo que siempre recomendamos es que os planteéis poner un postre sencillo, de sabor un poquito neutro, porque después de un menú potente como el de una boda se agradece comer algo suave que limpie el paladar.

Por eso la tarta es el «a medio camino» perfecto para escoger ese sabor que tal vez pensaste en poner de postre pero al final descartaste por ser demasiado exótico o tener mucho carácter.

Así seguirás teniendo tu sabor favorito presente ese día, pero de una forma mucho más sutil.

3. Y si tienes dudas o te quieres dejar recomendar, ¿blanca o de chocolate?

Depende. Depende de tus gustos pero también te recomendaríamos que pienses la temporada en la que te casas: en el verano lo ideal son sabores afrutados o cítricos y suaves, mientras que en otoño/invierno los chocolates y la avellana, por ejemplo, son los sabores estrella – sabores más earthy.

Drip naked cake de chocolate y frambuesa
Tarta de boda naked cake con chocolate y caramelo con flor

4. Reserva el piso de arriba.

Si finalmente escoges un tamaño superior al que, por cantidades, os corresponde, a la hora de cortar y repartir la tarta no empieces por el piso superior. La parte de arriba de una tarta nupcial es una belleza de por sí por lo que si finalmente os sobra tarta, que sea al menos la parte más bonita.

Muchas parejas la reservan para el día siguiente, tanto para celebrar ellos sólos o con el resto de la familia.

5. No descartes las presentaciones en alturas.

Puede que te apetezca poner tarta en alturas porque quieres tener ese momento corte, pero no quieres comprometerte con una tarta de pisos.

Una buena opción en ese caso son las peanas presentación: una peana con varias alturas donde en el piso superior se pone una tarta pequeña (de aprox. 6 raciones) para cortar y en los pisos inferiores se coloca pieza mini o de postre, en caso de que quieras aprovechar tu postre de boda.